Antes de crear, es importante analizar lo que hemos hecho y los resultados que hemos obtenido. Este análisis nos dará pistas de hacia donde debemos enfocarnos. Esto es lo que he hecho antes de escribir este post.
Ya hace un tiempo que me estoy fijando que uno de los artículos con más visitas es ¿Cómo tener una buena idea para crear una aplicación móvil de éxito?. Habiendo visto que os interesa el tema y aprovechándome que estoy asistiendo a un curso sobre creatividad, os voy a escribir sobre alguna metodología para crear las mejores aplicaciones móviles.
Antes de empezar con la práctica, creo que es importante saber qué es la creatividad ya que esto nos puede ayudar en nuestro proceso creativo de desarrollar nuevas apps.
Creatividad deriva del Latín (crear) y es una palabra que en su historia ha tenido múltiples significados. En la antigua Grecia, creatividad era sinónimo de poesía. El Cristianismo definía creatividad cómo inspiración divina. No fue hasta el siglo XIV que G. Chaucer que relaciona la originalidad y la utilidad con la creatividad. O sea, pasamos de algo divino a algo humano (¡y útil!). Un dato que me sorprende mucho es que la Real Academia de la Lengua Española (RAE) no incorpora el término creatividad en su diccionario hasta el 1983.
Vemos entonces que el concepto “creatividad” es algo relativamente nuevo aunque desde que inventamos la rueda hemos estado creando y siendo creativos.
¿Nacemos o nos hacemos creativos?
Allá por el siglo XVII, el escritor J. Dreyden postulaba que se nacía genio. El biólogo F. Galton también pensaba que la genialidad es innata pero apuntó lo que se llama la controversia naturaleza-ambiente, que permanece hasta hoy día. O sea… ¿es innato o el entorno tiene algo que ver?
En el siglo XX empezó la divergencia. Ya no todos pensaban que se nacía creativos. Simonton, por ejemplo, apunta que para ser creativo hay que tener unos rasgos determinados de personalidad aunque la mayor parte viene dada por el entorno en el que estamos. Vemos entonces que Simonton define que la creatividad viene determinada por:
20% Genes
80% Entorno
Entonces, si no nacemos… ¿Los inventores de Angry Birds o de la Candy Crush Saga sólo pueden ser ellos o podríamos haber sido cualquiera de nosotros?
Antes de responder a la pregunta y a modo de resumen me gustaría destacar:
- La creatividad no es una idea feliz ni una inspiración divina. La creatividad es el resultado de un gran trabajo.
- Todos podemos ser creativos.
- El entorno en el que estamos influye en nuestra creatividad. Si no estamos en un entorno muy creativo y queremos crear, posiblemente tendremos que movernos.
Estos tres puntos nos indican que cualquiera de nosotros puede desarrollar grandes aplicaciones como Candy Crush o Angry Birds. Hay que trabajarlo y rodearnos de creatividad. ¿Estáis preparad@s? ¡Yo sí!
En el siguiente artículo podréis aprender metodologías para ser más creativos. ¡No os lo perdáis!